¿Qué pasó en Guerrero con las evaluaciones a maestros?

En distintos noticieros de la televisión nacional se asegura que las evaluaciones derivadas de la “reforma educativa”, han sido en Guerrero un éxito de asistencia y que el sabotaje de los maestros a éstas ha fracasado.

En El Sur, periódico de Guerrero, del 10 de abril, apareció una inserción pagada (seguramente por la SEP) que transcribo literalmente:

Con la participación de 4 mil 123 docentes y directores de Educación Básica y Media Superior se alcanzó el 76% del total; al término del 2015 acudieron 513 maestros que sumaron en total mil noventa docentes evaluados de Educación Básica y Media Superior, ahora, en la segunda ronda de evaluaciones, se contó con cuatro mil 123 profesores, dando como resultado un 76 por ciento de los que se tenían programados, terminando así el proceso de evaluaciones del periodo 2015-2016.

Resulta imposible comprender este párrafo. A la horrorosa sintaxis hay que añadir su intención de dar información confusa, pero en la que quede clara la idea de que la “reforma educativa” ha sido exitosa.

Entre las pocas cosas inteligibles está que una cuarta parte de los profesores desacató la evaluación, aun con la amenaza de que, de hacerlo, serían cesados. No es poca cosa: si, según cifras oficiales, uno de cada cuatro maestros desafía la nueva ley educativa, es una minoría considerable y una fuerza importante.

Otra de las pocas cosas claras en la información oficial citada, es que, si poco más de cuatro mil maestros y directores son el 76%, entonces el total son poco más de cinco mil en todo el estado. Este dato no cuadra con la realidad: en Guerrero hay alrededor de 70 mil trabajadores de la educación. Entonces, ¿por qué la SEP sólo considera a menos de 6 mil a la hora de reportar a los que asistieron a evaluarse?  Si, como reconoce la SEP, sólo asistieron a evaluarse 4 mil 123, son menos del 10% de 70 mil profesores y directores que laboran en esta entidad.

Por otra parte, en el mismo El Sur, aparecen dos notas del reportero Abel Salgado, que refutan la información oficial.

“En los dos días de la evaluación… sólo atendieron el llamado de la SEP mil 90 maestros, el 40 por ciento de los convocados a la que sería la última oportunidad para quienes en diciembre debieron hacer el examen.

“Ayer, en el segundo día de evaluación…, la SEP informó que asistieron 513 maestros de los mil 261 convocados para este sábado, el 40.6% de los convocados.

“El viernes, de los mil 458 maestros convocados, sólo acudieron 577, el 39.6 por ciento. Así, mil 629 maestros de Guerrero, el 60% de los convocados, no asistieron a la evaluación impuesta por la SEP.”

El periodista informa que “no se permitió el acceso a reporteros para recabar material fotográfico o videográfico, ni para constatar el número de asistentes. Incluso a los trabajadores de Comunicación Social  del gobierno del estado se le restringió el paso…”

Salgado entrevistó también a los dirigentes magisteriales, a Walter Añorve, de la opositora CETEG (Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero), que denunció que la SEP “infló los números, porque reportó 577 asistentes al examen, pero sólo asistieron 356, el viernes.” Las autoridades, dijo, “no saben contar, no saben sacar porcentajes, y no saben cómo guiar las políticas públicas para el estado.” Afirmó que “la CETEG no permitirá que los maestros sean despojados de sus plazas y defenderán su fuente de empleo.”

La conclusión es clara: a la fecha, sólo unos pocos miles de maestros han sido evaluados, y entre el 60 y el 80% de los convocados no han asistido. Una proporción demasiado alta para que Nuño pueda considerar despedirlos a todos. La reforma educativa ha sido un fracaso también en Guerrero.